Augusto Roa Bastos referente de la intelectualidad liberal
Si existe ciudadano comprometido con los derechos humanos en su país, Paraguay, y una voz en todo el MUNDO. A lo largo de su vida, concedió numerosas entrevistas en las que habló sobre este tema y sobre su visión del papel del escritor y del arte en la lucha por la justicia social.
En una entrevista con la revista argentina Todo es Historia en 1976, Roa Bastos habló sobre el golpe de Estado que había tenido lugar en Paraguay en 1954 y sobre la situación de opresión y represión que se vivía en su país en aquellos años. En esa entrevista, él afirmó que el trabajo del escritor es denunciar las injusticias y hacer que la gente tome CONCIENCIA de ellas. También mencionó que, en su opinión, la literatura no es sólo un modo de entretenimiento, sino una herramienta para la reflexión y la transformación social. Hay que destacar la amistad con intelectuales de la talla de Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares.
En otra entrevista, realizada en 1984 por el periodista chileno Sergio Campos, Roa Bastos habló sobre el exilio que había sufrido en Argentina y sobre su obra “Yo el Supremo”, que fue prohibida en Paraguay en el momento de su publicación. En esta entrevista, él explicó que su novela tenía como objetivo mostrar la figura del dictador paraguayo José Gaspar Rodríguez de Francia como un ejemplo del abuso de poder y la tiranía, y que la censura era una muestra de la falta de libertad y democracia en su país.
En definitiva, Roa Bastos fue un escritor que supo aprovechar su voz y su talento literario para denunciar las violaciones de los derechos humanos y la opresión política en su país y en todo el mundo. Sus palabras y su ejemplo son un recordatorio constante de que el arte y la literatura pueden ser poderosas armas en la lucha por la justicia y la dignidad humana.